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Debilitamiento del principio de presunción de inocencia

El debilitamiento del principio de presunción de inocencia en el último tiempo puede atribuirse a diversos factores, entre ellos:

- Incultura de la legalidad y de la verdad.
- Problemas de ética judicial.
- Debilidad del Poder Judicial.
- Percepción social de una justicia lenta, corrupta e identificada con cuotas de poder.
- Falta de involucramiento e indiferencia de la ciudadanía.
- Falta de preparación profesional y especializada, y faltas a la ética de operadores jurídicos y de instituciones.
- Falta de educación de los ciudadanos en el respeto a la honra y la poca educación cívica.

Estos factores, en conjunto, contribuyen a la vulneración del principio de presunción de inocencia y debilitan su aplicación adecuada en la sociedad actual.

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Consecuencias 


El debilitamiento del principio de presunción de inocencia no solo amenaza nuestros derechos fundamentales, sino que también representa un peligro directo para cada uno de los ciudadanos, para sus seres queridos y para toda nuestra sociedad.  Las consecuencias son:

- En la esfera judicial, el debilitamiento de la presunción de inocencia aumenta el riesgo de que cualquier ciudadano sea condenado injustamente por un delito que no cometio. 

- Socialmente, el debilitamiento de la presunción de inocencia abre la puerta a falsas acusaciones y estigmatización.

- El  honor y la vida personal de cada ciudadano puede ser destrozada por acusaciones infundadas que le coloquen automáticamente en el papel de culpable sin derecho a defensa o a un juicio justo.

- Si permitimos que el principio de presunción de inocencia sea socavado, nos exponemos a un sistema judicial desequilibrado y a decisiones basadas en prejuicios y emociones en lugar de pruebas sólidas y razonamiento imparcial.

- Esto no solo afecta a aquellos que están directamente involucrados, sino que erosiona la confianza en el sistema legal en su conjunto.

El debilitamiento de la presunción de inocencia es un retroceso en derechos civiles básicos y derechos humanos, que nos lleva hacia una sociedad más primitiva, injusta e involucionada, en donde se da lugar a la autotutela.